Foto: esbozodeportivo.com)
Por: Cristian Núñez; Javier de la Cruz y Edu B. Cortés
El Centro Vacacional del IMSS en Oaxtepec, Morelos, se prepara para recibir, del 17 al 21 de noviembre, a más de dos mil trabajadores que competirán en los 52 Juegos Nacionales Deportivos y Recreativos de los Trabajadores de México. Este magno evento, organizado por el Instituto del Deporte de los Trabajadores (INDET), es considerado el máximo escaparate del deporte para el sector obrero en el país.
Uno de sus más promoventes de estos juegos y de la activación física de los trabajadores es el Profesor y secretario ejecutivo del INDET, Pablo Reyes Osorio, quien, en entrevista exclusiva para esbozodeportivo.com, expresó lo importante que es el deporte amateur, física y mentalmente, además de los Juegos Nacionales en el Sector laboral en México.
“Es un evento en donde participan dos mil cien trabajadores de veinticinco estados del país y de doce centrales sindicales. Este año tuvimos que limitar el número de participantes debido a la capacidad de hospedaje, pero eso no disminuye la importancia de este encuentro. Para nosotros, estas son las olimpiadas del sector obrero”, explicó.
El programa incluye competencias en disciplinas como atletismo, ajedrez, básquetbol, natación, voleibol de sala y de playa, béisbol y una categoría especial: el baile regional. Esta última combina tradición cultural con exigencia física, resaltando la riqueza de las danzas folclóricas mexicanas.
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Camino a Grecia: una plataforma internacional
Los juegos no solo celebran el talento deportivo de los trabajadores mexicanos, sino que también funcionan como evento selectivo para los Juegos Mundiales de los Trabajadores, que se llevarán a cabo en junio de 2025 en Loutraki, Grecia.
“Este evento es único porque brinda a los participantes la oportunidad de representar a México en un escenario mundial. En 2022, en Italia, nuestra delegación quedó en segundo lugar del medallero, superada solo por Austria. Esto nos llena de orgullo y nos motiva a pelear por el primer lugar este año”, comentó Reyes Osorio.
Con un promedio estimado de 300 representantes mexicanos para la competencia mundial, el entrevistado destacó la calidad de los atletas y su dedicación: “En los primeros Juegos Mundiales, la mentalidad era nuestra mayor barrera. Ahora, los equipos mexicanos han desarrollado estrategias que compensan diferencias físicas con rivales europeos, demostrando que la habilidad y la astucia también son clave”.
“Más allá de los resultados, el deporte permite a las personas superar desafíos personales, desarrollar disciplina y representar con orgullo a su empresa, estado o sindicato. Eso es lo que buscamos fomentar con este evento: que el deporte sea parte integral de su vida”, explicó.
Uno de los aspectos más destacados del evento, de acuerdo con el Profesor, es la creciente participación de las mujeres. Según Reyes Osorio, aproximadamente el 30% de los competidores serán mujeres, quienes equilibran sus roles como trabajadoras, madres y deportistas para competir al más alto nivel.
“La mujer mexicana es un ejemplo de perseverancia. Su participación ha sido clave en nuestros logros internacionales. Han logrado medallas y grandes resultados, demostrando que, con esfuerzo, no hay límites”, afirmó.
El secretario también destacó cómo los trabajadores mexicanos han enfrentado a potencias como Rusia, Austria y Países Bajos en diversas disciplinas:
“En deportes como el voleibol y el básquetbol, los mexicanos han perfeccionado técnicas que compensan diferencias físicas. Hemos visto jugadas sorprendentes que combinan creatividad y astucia. Esto demuestra el carácter competitivo de nuestros equipos y su capacidad de adaptación”.
En 2022, el equipo de fútbol de Baja California Sur se coronó campeón tras derrotar al equipo de Francia en una final que dejó claro que el esfuerzo y la pasión mexicana son capaces de superar cualquier adversidad.
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Un compromiso con la salud integral y el bienestar social
Pablo Reyes también destacó que el deporte, además de ser una vía de esparcimiento, juega un papel crucial en la prevención de problemas sociales graves como la drogadicción y el alcoholismo.
«El deporte es una manera de distracción, para que no haya entre los jóvenes la drogadicción, el alcoholismo, todo eso», expresó, señalando que una de las claves para fomentar esta práctica no solo dentro del ámbito laboral, sino también en el núcleo familiar, es la participación activa de los trabajadores y sus seres queridos. Según el profesor Reyes, los trabajadores que practican deporte actúan como promotores naturales dentro de sus hogares, motivando a sus hijos y cónyuges a seguir su ejemplo.
En este sentido, la integración familiar es parte de una estrategia más amplia del Instituto del Deporte de los Trabajadores (INDET) para promover una sociedad más sana.
«El trabajador que hace deporte es un trabajador sano, es un trabajador que le vive más a la familia, que le reditúa a la empresa en donde trabaja, es más productivo, es menos enfermo», indicó el secretario ejecutivo.
En los últimos años, el INDET ha trabajado incansablemente para acercar el deporte a los hijos de los trabajadores, un esfuerzo que culminó con la participación de estos en los Juegos Nacionales de la Conade, un evento que, según Reyes, «es solo un resultado del programa, cuyo principal objetivo es promover la activación física, la recreación y el deporte para favorecer la salud de los trabajadores».
Además, destacó la importancia de erradicar el sedentarismo en las familias mexicanas. «Una familia donde no hay actividad física, donde el papá o la mamá no practican deporte, son un mal ejemplo para los hijos», enfatizó, describiendo cómo el sedentarismo afecta negativamente la salud de las personas, tanto a nivel físico como psicológico.
Con la creciente prevalencia de enfermedades relacionadas con el estrés, el uso excesivo de tecnología y hábitos de vida poco saludables, el trabajo del INDET cobra aún más relevancia. «Es necesario promover espacios para la actividad física dentro del entorno laboral, no solo como un beneficio para los trabajadores, sino también para sus familias», sostuvo el profesor Reyes.
La visión hacia el futuro: promover el deporte en familia
A pesar de los avances logrados, el INDET también enfrenta varios retos. Una de las mayores barreras sigue siendo la falta de infraestructura adecuada en muchas empresas, algo que ha sido particularmente evidente en compañías que, a pesar de contar con instalaciones de primer nivel como gimnasios y albercas, no logran motivar a sus trabajadores a utilizarlas.
«En lugares como la Volvo, nos hemos encontrado con gimnasios impecables que no se utilizan. El trabajador llega tarde y no tiene tiempo de hacer ejercicio antes de su jornada laboral, y después, está tan cansado que no le interesa», señaló Reyes, comentando que la cultura de trabajo debe transformarse para integrar el deporte como parte esencial de la rutina diaria.
Para abordar esta falta de motivación, el INDET ha implementado cursos de capacitación para que los mismos trabajadores sean los encargados de organizar actividades recreativas dentro de sus centros laborales. Estas incluyen desde juegos grupales hasta ejercicios físicos sencillos, diseñados para reducir el estrés y promover la salud.
«Lo que estamos logrando es enseñarles que, aunque sea por 10 minutos, pueden hacer actividad física, lo que ya es una ganancia», comentó el profesor Reyes.
Sin embargo, la falta de recursos sigue siendo un desafío.
A pesar del apoyo de la CONADE y otros aliados como el Congreso del Trabajo, el financiamiento para eventos y programas sigue siendo limitado. «El gobierno da un apoyo que no es suficiente, pero nosotros tratamos de complementarlo con las cuotas de inscripción que los sindicatos o las empresas cubren», explicó. A pesar de estas limitaciones, el INDET sigue buscando formas de hacer crecer sus programas, incluyendo nuevas iniciativas de apoyo a trabajadores con capacidades diferentes.
Un futuro inclusivo: hacia una sociedad más sana y unida
A largo plazo, el INDET planea seguir expandiendo su enfoque hacia los jóvenes, con la esperanza de crear una versión más inclusiva de los Juegos Nacionales de los Trabajadores.
«Queremos juntar a los hijos de los trabajadores, y en un futuro tener unos Juegos Nacionales donde participen tanto los trabajadores como sus hijos. Un evento donde todos se integren y compartan la experiencia del deporte», compartió Reyes con entusiasmo.
Este modelo de integración familiar en el deporte no solo busca mejorar la salud física, sino también fortalecer la unidad social. «El deporte une, fortalece la unidad familiar y social. Es algo increíble ver cómo los papás apoyan a sus hijos en los Juegos Nacionales», concluyó el profesor Reyes, con la certeza de que el trabajo conjunto, entre el INDET, los sindicatos, las empresas y el gobierno, es la clave para lograr una sociedad más sana, activa y cohesionada.
